Internet, la gran “autopista de la información”. Todos hemos estado durante horas sentados, trabajando, leyendo, jugando o socializando a través de la internet. Su vasta cantidad de información y entretenimiento al alcance de todos la hace una herramienta infinitamente útil para grandes y chicos.
Pero como todo, no puede ser solo bueno lo que obtenemos de ella. También existen informaciones herradas, publicaciones sensacionalistas que sólo generan caos y, sobre todo, la inseguridad.
Porque claro está que, así como tomamos toda la información que queremos de ella y de los demás, la internet y sus demás usuarios también pueden tomar información de nosotros, información tan trivial como un estado de Facebook o nuestra fecha de cumple años, hasta un correo empresarial, fotos privadas, o la clave que utilizamos para acceder a nuestras cuentas de banco y esto representaría un gran problema de seguridad para nosotros.
Si eres de las personas que mantiene un uso frecuente de la web, no está demás que sepas un poco sobre la seguridad en internet. Para adentrarnos un poco en la seguridad de algo, debemos comprender mejor que es este algo. Debemos comprender que la internet es una red, pero a gran escala, digamos que es la red de computadoras de su casa, donde 2 o más ordenadores están conectados mediante cables y estos comparten algún tipo de información entre ellos.
Internet nació así, como una red para compartir información entre varios ordenadores, de esta forma se evitaría la necesidad de levantarse a mostrarle a alguien el avance en nuestro trabajo, inclusive, podría realizarse trabajo en conjunto de una manera más interactiva y rápida, aportando todos en tiempo real.
De esta pequeña GRAN idea, ha evolucionado hasta lo que conocemos hoy como la WWW (World Wide Web) por sus siglas en inglés. Un gigantesco entrelazado de ordenadores, teléfonos y aparatos electrónicos de casi cualquier tipo compartiendo información 24/7 entre sí.
Teniendo esto claro, debemos comprender algo, toda esa cantidad de información, está disponible para todos en todo momento, sólo necesitamos saber ubicarla. Y básicamente todo lo que hemos publicado, registrado y leído en línea, seguirá ahí incluso luego de borrarlo. Una foto familiar, una opinión personal, un recuerdo con una ex pareja, correos personales o profesionales. Todo esto está al alcance de un hacker o instituciones de “seguridad” que, bajo el manto de querer protegernos, violan muchas veces nuestra privacidad.
Seguridad personal en internet
¿Quién no ha publicado un estado diciendo que hace? ¿Quién no ha twiteado que va saliendo o ya está en algún sitio? O más simple aún, ¿Quién no ha aceptado una solicitud de amistad solamente por el hecho de tener más “amigos”, pero en realidad no sabemos quién es esa persona? ¿O hemos hecho un check in para recomendar un restaurante o algún hotel?
Todas estas acciones por muy inocentes o comunes que nos parezcan son de alto riesgo en la sociedad en la que vivimos. Cualquiera con acceso a uno o varios de nuestros perfiles, podría usarlo para causarnos algún daño. Existen muchos casos de personas víctimas de robo o secuestro sólo por publicar algo como “saliendo a comer en tal lugar”. O “Llegando a casa luego de un largo día”. Esta es la forma más básica en la actualidad para violentar nuestra seguridad y poner en peligro a nosotros o a los que nos rodean.
Veamos algunos consejos para mejorar nuestra seguridad en internet a nivel personal
- Minimizar las publicaciones dando detalles de ubicación, actividades diarias o monetarias.
- Antes de realizar una publicación, evaluar si es algo que no conlleva repercusiones o pueda ser utilizado en nuestra contra.
- Al compartir imágenes, intentar que estas no sean de carácter privado, ya que cualquier persona podrá verlas.
Seguridad informática en internet
¿Qué podría hacernos daño al navegar en la red? ¿Podría salir algo del monitor y hacernos daño? La verdad es que esto aún no es posible. Más allá de problemas de espalda, en la vista o en el túnel carpiano, navegar por horas no debería poder hacernos daño. Pero, ¿Nuestra PC? Esa fiel amiga que día y noche está ahí para acompañarnos en la diversión o en el trabajo si puede resultar dañada si no prestamos atención a cada “click” que hacemos en alguna web.
Todos hemos recibido ese clásico correo o anuncio ofreciendo una visa de residencia para algún país, una cantidad muy grande de dinero y hasta la invitación de alguna linda chica a conocernos. Algunos son más alarmantes como “Su PC está en riesgo, presione para realizar reparaciones” y, ¿Cuál es nuestra sorpresa? Presionamos y efectivamente nos aparecen un sinfín de errores, amenazas, malware y pare usted de contar, lo extraño es que hasta hace unos minutos la computadora funcionaba sin problemas, estábamos cómodos escuchando nuestra música favorita, compartiendo imágenes, y conversando con nuestros familiares.
Pero a pesar de todo, nos creemos la historia y hacemos click en el gigantesco botón que dice “reparar”. Luego de esto nos aparecerán íconos nuevos en el escritorio los cuales suponemos son la solución milagrosa a los problemas de funcionamiento.
Pero ese no es el mayor de los problemas, el problema mayor, son las aplicaciones que no vemos que se instalan ocultas y que conocemos como virus, que solo vienen a causarnos problemas. Algunos hacen un mal uso de los recursos, causando mal funcionamiento.
Otros espían lo que hacemos y, por último, pero muy molestos, llenan todo de publicidad, publicidad que genera ingresos para alguien, pero a nosotros nos causa una gran molestia.
Tal vez no veamos de manera clara cómo esto afecta nuestra seguridad, pero una computadora vulnerada, puede ocasionarnos pérdida de información valiosa y gasto de dinero innecesariamente. Esa es una violación a nuestra seguridad en internet.
¿Cómo cuidarnos de estas amenazas virtuales?
- Evitar en la medida de lo posible el uso de páginas web no certificadas o de sitios dudosos.
- Nunca llenar formularios de los que desconocemos la procedencia, sin importar el tipo de “ganancia” que se nos ofrezca en estos.
- Realizar respaldos de nuestra información importante de manera regular, de esta manera evitamos perderla en caso de un ataque.
- En la medida de lo posible, no utilizar ordenadores públicos para actividades privadas, como operaciones bancarias o de trabajo.
- Hacer caso omiso de publicidad engañosa.
Seguridad empresarial en internet
Ya sabemos que existen riesgos en internet para todos, desde un joven que solamente quiso compartir su experiencia en un restaurante hasta la abuelita que pensó que realmente ganará 1 millón de dólares haciendo click en aquella publicidad. Pero ¿Y nuestros trabajos? ¿La empresa que realiza envíos de mercancía? ¿El banco que maneja el dinero de todos? ¿la institución pública con una base de datos tan extensa que contiene la información personal de todos? ¿Qué hay de ellos? En este caso estamos hablando de seguridad e información a gran escala, no pueden darse el lujo de ser afectados por un ataque ya que es mucho lo que está en juego.
Entonces, ¿Cómo se enfrentan las corporaciones a la inseguridad?
Está demás decir que esto conlleva a una inversión de muchísimo dinero ya que generalmente se necesita la subcontratación de una empresa especializada en la seguridad en internet y esta realiza un proyecto ajustado a las necesidades de cada empresa en particular.
En ciertos casos se utilizan redes privadas a las que sólo se tiene acceso mediante ordenadores y protocolos de la empresa a lo que llamamos intranet, que no es más que una red con protocolos de internet, pero que es utilizada particularmente por alguna organización para compartir información de sus servidores privados. Esto limita en gran medida el acceso a personas no autorizadas ya que la violación necesita de algún modo acceso físico a los dispositivos.
También es común establecer niveles de acceso a distintos tipos de información y cada nivel representa un grado más de seguridad, esto refleja también un nivel más de confianza al empleado que se le permita el acceso, así se evita que personas trabajando en una red, tengan acceso a datos que aun estando en dicha red no están permitidos para ellos.
Quedando así que un vigilante pueda tener acceso a la lista de empleados autorizados a entrar a la empresa, pero no tenga acceso a los datos que tenga ese empleado en su ordenador y a su vez, este empleado no pueda acceder a los correos privados de la directiva de la empresa.
En conclusión, nadie está 100% a salvo desde el momento en que conectamos nuestro dispositivo a la internet. Pero ¿Viviremos con miedo por esto? ¿Nos desconectamos para siempre? ¡NO! Esas no son medidas coherentes a la realidad en la que vivimos.
Es mucho más fácil tener en cuenta que hacemos con ese gran invento que más allá de ser un enemigo, es un aliado en nuestra vida diaria. Tener siempre en cuenta que existe un riesgo y evaluar bien el uso que le demos va a determinar qué tan vulnerables somos a esas personas que están del otro lado esperando para atacar. Como pudimos ver, teniendo en cuenta unos pocos consejos podemos aumentar fácilmente nuestra seguridad en internet.